Ansiosa mente

"Ella, la Sara,  tampoc sabia el que em passava, com ningú. I jo no em sabia explicar bé perquè no entenia res. Al cap i a la fi, jo tampoc tenia informació. Qui hauria pogut? Però ella va ser la única que em feia sentir i recordar que no era invisible. M'escoltava amb atenció, sense jutjar, una vegada i una altra. Sempre atenta, sempre pacient, molt pacient, sempre amb ànims per donar-me i fer-me sentir una mica millor dins de tant espant i sofriment. Ara que sóc conscient de tot, penso que mai li podré agrair suficient haver estat al meu costat en aquells moments tan difícils i solitaris per mi. Era la única que aportava escalfor i somriures a un interior fred, destrossat i deprimit. Jo no era una adolescent amb una adolescència mal portada. Jo era una adolescent amb una malaltia mental." Marina Font i text sencer: El que cal dir

“Cuando el sentir pide paso” Un momento de un día inesperado decides ordenar ideas y sentires en el silencio de un amanecer que tan sólo despunta y el mundo parece dormir, incluso no existir. El impulso nace, de vaciarte en la libreta. La mano parece tener vida propia y las palabras se escriben casi solas. Algo de adentro se queda en paz. El sentir pide paso y sólo puedo permitirlo. Dedicarse un momento para recapitular, hacer balance y actualizar la ficha. A modo de ejercicio de autoindagación, se proponen 4 preguntas: ¿De que voy tomando consciencia? ¿Que creo al respecto? ¿Que siento? ¿Que aprendo? Aquí presentamos a modo de ejemplo el testimonio de un colaborador de AnsiosaMente. Voy tomando consciencia: Un poco de estrés, ahora representa mucho desgaste. Me pone en un estado de alerta y  tensión muy alto. Evito reuniones familiares. Evito quedar con la mayoría de amigos. He reducido mi vida a cubrir necesidades básicas.

Y levantar los brazos y agradecer por un momento que está nevando, o que ha nevado. Como si el júbilo primaveral se asomara en el más meridiano invierno. Como la vida misma, cuando creemos que estamos en nuestro particular invierno y, por aquellas casualidades (o causalidades sincrónicas), se nos dispara una sonrisa que no encaja en esa época emocional se supone más regia, más solemne e  institucionalizada por la razón y el contenerse. Y va, y sale! esa sonrisilla delatadora se abre paso hacia una superficie que parecía estar más lejos y menos disponible hace tan sólo unos segundos. Los brazos se levantan, reivindicando su lugar hacia lo alto, el pecho se expande y la sonrisa deja de ser una insinuación para convertirse en una expresión global de gratitud y entrega. Gracias, gracias, gracias.

Sólo recordarnos que la respiración es muy importante en el control de la ansiedad. Y que esta imagen nos invita a conectar-nos con nosotros mismos y seguir nuestro ritmo. Ritmo. Así podemos entender la respiración. Así el caminar, El bombeo del corazón que hace con la sangre. Unos ritmos voluntarios y otros involuntarios. Y la respiración se corresponde con los dos. Podemos respirar al ritmo que decidamos o bien dejar que nuestro cuerpo respire de forma automática. Y cada uno con su ritmo...

En el vídeo que presentamos hoy nos proponen la práctica de Yoga Nidra, una relajación guiada a través de la consciencia corporal y el viaje interior hacia nosotros mismos. Una práctica sencilla y muy profunda. Un estado de calma interior. Un buen hábito para realizar de forma diaria. Sólo estirarnos y seguir las instrucciones que se nos van facilitando. Conseguir un estado de profunda relajación. Encontremos el momento y el lugar.

Des de este espacio recomendamos la lectura del libro: El poder del ahora ECKHART TOLLE Sobre la meditación, la atención y la espiritualidad. Aclara algunos conceptos y nos invita de forma sugerente a conectarnos con nosotros mismos. Dejamos abierto el espacio para comentar vuestras impresiones sobre la lectura de este libro.

Cuando llevamos cierto tiempo sintiendo ansiedad, vamos relacionando ciertos síntomas (físicos, emocionales i mentales) con el estado propio de la ansiedad. Algunos de estos síntomas los convertimos en avisadores de que la ansiedad está llegando, y si hemos desarrollado algunas estrategias para gestionar ese momento (relajación, cambio de hábitos, respiración, etc.) podemos superarlo sin llegar a sentir la ansiedad. Otros síntomas quizás no sean precursores de momentos de ansiedad, pero los hemos convertido en eso, en provocadores de ello. En este artículo se trata de de volver a darle significado a los síntomas que hemos catalogado como anticipadores de momentos de ansiedad.

En este artículo queremos transcribir una entrevista realizada por La Vanguardia a Montse Bradford, especialista en alimentación energética. Nos habla sobre las propiedades de los alimentos en tanto son capaces de modular nuestro sistema emocional. Montse Bradford Fundadora de varias escuelas de cocina, esta barcelonesa de nacimiento, afincada en Londres desde 1978 hasta 2006 (ahora reside en la Ciudad Condal), ha dado clases en la Escuela Universitaria de Enfermería y Fisioterapia Blanquerna e impartido cursos por toda Europa y también por Sudamérica.

La sensación de que los alimentos que hemos tomados se han quedado estancados en el estómago no solo es muy molesta, sino que puede agrabar los síntomas de la ansiedad. No solo el malestar digestivo que esto nos provoca es suficiente como para intertar evitarlos, sino las consecuencias que ello convella para nuestra salud en general.

Sugerente título de una canción del grupo Cuarteto de Nos de Uruguay. Cuando nos parece que ya lo hemos probado todo, parece que nuesta vida gira en una espiral de repeticiones de las mismas acciones en escenarios aparentemente distintos. El anelado cambio de hábitos, de costumbres, de valores y creencias, en ocasiones parece entrar en barrena. Una acertada forma de mostrar la contradicción humana con una acertada y bien hilada canción autocrítica....

EMDR, es la sigla en inglés de Desensibilización y Reprocesamiento por movimientos oculares. Está técnica se basa en la estimulación bilateral. Consiguiendo así estimular y procesar la información con los dos hemisferios cerebrales.

Para hablar sobre las emociones de la Tristeza y la Fúria que mejor que hacerlo con un cuento de Jorge Bucay. Este cuento lo podemos encontrar en su libro: Cuentos para pensar.